En la actualidad, casi el 90% de la población adulta española está expuesta a un riesgo de deterioro de la salud por falta de actividad física o por pasar demasiado tiempo sentada, según un estudio del Eurobarómetro de Deporte y Actividad Física. Solamente el 11% de los españoles ha declarado ejercitarse con regularidad, datos que han empeorado después de la pandemia. 

Por eso, animar a los empleados a adoptar estilos de vida que fomenten la actividad física y combatan el sedentarismo debería ser una prioridad para las empresas. Los empleados con trabajos sedentarios están aún más preocupados, porque pasan demasiado tiempo sentados frente a una pantalla. The Corporate Gym te da 4 consejos para mantenerte activo durante todo el día, ¡en la oficina o en casa!

1. Pausas activas regulares

Cuando estás sentado en tu silla y detrás de tu pantalla en la oficina, una de las claves para combatir el sedentarismo es romper la inmovilidad. El Ministerio de Deportes recomienda una pausa de 5 a 10 minutos cada 90 minutos. Programar pausas regulares aumentará tu productividad. Las pausas revitalizan el cuerpo y, por tanto, estimulan la mente. Aproveche este tiempo para pasear por los locales de la empresa, utilizar las escaleras, subir y bajar escalones a un ritmo constante. Es perfectamente posible estimular ciertos músculos y hacer algunos ejercicios sencillos de fortalecimiento en la oficina. He aquí algunos ejemplos:

• Espalda redonda, espalda hueca: Colócate en el extremo de la silla y alterna entre la inspiración de la espalda redonda y la espiración de la espalda hueca.
• La plancha: apoyado en el escritorio (codos o manos), alarga el cuerpo y las piernas para crear una plancha y mantén la posición de 15 a 60 segundos.
• Sentado en su silla, levante los pies del suelo, ¡para trabajar los músculos abdominales!

2. Cowalking o reuniones a pie 

El cowalking o el walk and talk fue adoptado por el fundador de Apple, Steve Jobs. Sin embargo, sus orígenes se remontan a grandes pensadores como Freud y Aristóteles, que ensalzaron sus virtudes. En lugar de sentarse alrededor de una mesa durante las reuniones, el cowalking es la alternativa ideal a las tradicionales reuniones: caminar y respirar aire fresco durante unos veinte minutos aumenta la productividad, mejora la moral y también potencia la creatividad. ¡Así que es perfectamente posible disfrutar de los beneficios del ejercicio mientras se mantienen conversaciones importantes!

3. Inspira, espira 

A menudo descuidada en el entorno profesional, la respiración, a pesar de ser obvia en el día a día, influye en nuestro bienestar y eficiencia en el trabajo. La respiración consciente contribuye a la claridad mental al llevar oxígeno al cerebro, lo que mejora la concentración y la capacidad de tomar decisiones.

Incorporar esta práctica a tu rutina de trabajo es esencial. Los ejercicios de respiración discreta pueden producir resultados notables. Pruebe la respiración abdominal: inhale lentamente por la nariz mientras expande el vientre y luego exhale suavemente por la boca. Estos momentos de pausa también favorecen la gestión del estrés, permitiéndote trabajar con mayor serenidad.

4. Accesorios de fitness

Utiliza una pelota de ejercicios como silla de escritorio para fortalecer los músculos abdominales y mejorar la postura mientras trabajas. Aprovecha los accesorios de fitness para que tu entorno de trabajo sea más propicio a la actividad física. Ten a mano mancuernas ligeras o bandas de resistencia para hacer ejercicios de fortalecimiento muscular durante las pausas.

El Ministerio de Salud recomienda 30 minutos de actividad física de intensidad moderada a alta para desarrollar la aptitud cardiorrespiratoria, al menos 5 días a la semana, evitando 2 días consecutivos sin ejercicio. Las actividades físicas dirigidas a la forma física cardiorrespiratoria y las dirigidas a la forma física muscular pueden integrarse en la misma actividad o durante el mismo día.

En conclusión, luchar contra el sedentarismo en el trabajo y mantenerse activo en la oficina requiere comprometerse a incorporar la actividad física en tu rutina diaria. Siguiendo estos pocos consejos, puedes reducir los efectos nocivos de un estilo de vida sedentario. La iniciativa personal desempeña un papel importante, tanto para hacer suficiente ejercicio como para reducir el comportamiento sedentario.

Pero para alcanzar niveles suficientes a nivel individual, son muy importantes las acciones colectivas y a largo plazo, mediante la creación de un entorno general propicio al cambio de comportamiento. Ofrecer a los empleados la oportunidad de acceder a un gimnasio o participar en clases en el lugar de trabajo forma parte de ello.